El auge del negocio de la comida a domicilio y los nuevos hábitos de consumo han popularizado en el sector de la restauración el concepto de las cocinas fantasma o dark kitchens, despertando el interés de un gran número de inversores en nuestro país.
En aras de dotar de una mayor seguridad jurídica a estos establecimientos y otras actividades vinculadas al reparto a domicilio, Barcelona y Madrid han sido las ciudades pioneras en plantear una reforma que introduzca en la legislación urbanística un modelo que busque un equilibrio en la coexistencia de los usos comerciales e industriales y el uso residencial, evitando distorsiones en el modelo urbano y posibles fricciones en la convivencia ciudadana.
En la presente Newsletter analizamos las principales novedades aprobadas en esta materia (o en proceso de aprobación) tanto en Barcelona como en Madrid.
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